Según el consenso científico, las actividades humanas calientan el planeta sólo desde el siglo pasado. La opinión pública ha hecho también suya esta tesis. Con sus fábricas y centrales térmicas que quemaban carbón, las sociedades recién industrializadas vertieron a la atmósfera dióxido de carbono y otros gases de invernadero. Más tarde, se sumaron las emisiones de los vehículos a motor. Conforme esta manera de ver las cosas, quienes vivimos en la era industrial somos responsables, no sólo de la mayor concentración de tales gases en la atmósfera, sino también de una parte, al menos, de la tendencia al calentamiento global que la acompaña. Ahora, sin embargo, se han hallado razones que mueven a pensar que nuestros antepasados campesinos añadieron ya gases de esa especie a la atmósfera hace milenios. Habrían alterado así el clima terrestre mucho antes de lo que se pensaba
ISBN: 0210136X
Atención NO ES UNA RESERVA!
Es solo a los efectos de disponer de los datos del ejemplar para solicitarlo a biblioteca.
Tenga presente también que puede seleccionar favoritos
(los documentos que le interesen) durante su
sesión y obtener una lista de ellos.
Formulario para Solicitud de Material
Ruddiman, William F.
Calentamiento antropogénico preindustrial
En: Investigación y ciencia. -- no. 344 (mayo, 2005). -- Barcelona : Prensa Científica, 1977
Según el consenso científico, las actividades humanas calientan el planeta sólo desde el siglo pasado. La opinión pública ha hecho también suya esta tesis. Con sus fábricas y centrales térmicas que quemaban carbón, las sociedades recién industrializadas vertieron a la atmósfera dióxido de carbono y otros gases de invernadero. Más tarde, se sumaron las emisiones de los vehículos a motor. Conforme esta manera de ver las cosas, quienes vivimos en la era industrial somos responsables, no sólo de la mayor concentración de tales gases en la atmósfera, sino también de una parte, al menos, de la tendencia al calentamiento global que la acompaña. Ahora, sin embargo, se han hallado razones que mueven a pensar que nuestros antepasados campesinos añadieron ya gases de esa especie a la atmósfera hace milenios. Habrían alterado así el clima terrestre mucho antes de lo que se pensaba
ISBN: 0210136X