Góngora, Luis de
Poesías completas [FICCION]. -- Buenos Aires : Sopena, 1949. -- Biblioteca mundial Sopena
La biblioteca posee: v.1. Contenido: ROMANCES: Ciego que apuntas y atinas. Los rayos le cuenta la sol. La más bella niña. Hermana Marica. En el caudaloso río. Las redes sobre la arena. Erase una vieja. Diez años vivió Belerma. En la pedregosa orilla. Que se nos va la pascua, mozas. Amarrado al duro banco. La desgrcia del forzado. Aqui entre la verde juncia. Aquel rayo de la guerra. Triste pisa y afligido. Noble desengaño. Ahora que estoy de espacio. Servía en Orán al rey. Entre los sueltos caballos. Esucchadme un rato atentos. Ensíllenme elasno rucio. Criábase el albanés. Ilustre ciudad famosa. Autorretrato.Desde Sansueña a París. Pensó rendir la mozuela. Famosos son en las armas. Frscos airecillos. Lloraba la niña. Si sus mercedes me escuchan. A doña Beatriz de Haro. Que necio que era yo antaño. Castillo de san Cervantes. Teniendo sus blancois paños. A vos digo, señor Tajo. ¿No me bastaba el peligro...?. Murmuraban los rocines. Levantando balnca espuma. A la muerte de doña Luisa de Cardona, monja en Santa Fe de Toledo. Sin Leda y sin esperanza. Al vuelo de la mudanza de una dma, en cierta ausencia que el autor hizo, a dar parabién de su obispado a cierto obispo. A don Pedro Venegas en cuya casa iba a jugar algunos días. A un caballero que se jactaba de que decendía de cuatro grandes, y no era así, ni él era de buenas costumbres. Las aguas de Carrión. Sobre unas altas rocas. En tanto que mis vacas. A Angélica y Medoro. Según vuelan por el agua. ¡Oh cuan bien que acusa Alcino. En dos lucientes estrellas. En los pinares de Júcar. Trepan los gitanos. Cuando la rosada aurora. De Tisbe y Píramo quiero. Fábula de Píramo yTisbe. A un tiempo dejaba el Sol. De la Marquesa de Ayamonte y su hija. . las flores del romero. Los montes que el pie se lavan. En el baile del ejido. Del Palacio de la Primavera. Ensaladilla. Saliéndome estotro día. A la fábula de Leandro y Hero. Arrojóse el mancebito. Vejámen que se dió en Granada a un sobrino del administrador del hospital Real, que es la Casa de los Locos. Cloris, el más bello grano. Loa que recitó un sobrino de don fray Domingo de Mardones obispo de Córdoba, en una comedia que le representaron él y otros caballeros estudiantes. Lisonjea a doña Elvira de Córdoba, hija del señor Zuheros. En la beatificación de Santa Teresa. Cuatro o seis desnudos hombros. A una dama de qñuien D. Gonzalo de Figueroa estaba enamorado, estando preso de Ucles. Contando estaban sus rayos. Al pie de un álamo negro. Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. Romance amoroso. Ojos eran fugitivos. Manzanares, Manzanares. Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. Del Rey y Reina, nuestros señores, en Aranjuez, antes de reinar. Del Rey, nuestro señor, en la misma ocasión. En la fuerza de Almería. Por las faldas del Atlante. Minguilla la siempre bella. Con su querida Amarilis. En lágrimmas salgan mudos. Guarda corderos, zagala. De las señoras doña Francisca y doña Margarita Tabora y doña María Cotiño. Al Santísimo Sacramento. La cítara que pendiente. Ave del plumaje negro. Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. A la fuente va del olmo. Letrilla satítica. LETRILLAS. Que pida a un galán Minguilla. Andeme yo caliente. Da bienes Fortuna. Manda amor en su fatiga. Si las damas de la Corte. Si en todo lo cago. Clavellina se llama la perra. Buena orina y buen color. Ya no más,ceguezuelo hermano. Vuenoa, pensamiento y diels. Un buhonero ha empleado. Mandadero era el arquero. A toda ley, madre mía. Cada uno estornuda. Ya de mi dulce instrumento. A los hijos de un zapatero rico, que gastaron lo que les dejó su padre. Allá darás, rayo. ¿Por qué llora la Isabelitica?. Dineros son calidad. Cura que en la vecindad. Una moza de Alcobendas. De un monte en los senos, donde. ¿Qué lleva el señor Esgueva? A Nuestra Señiora de Villaviciosa, por la salud de don fray Diego de Mardones, obispo de Córdoba. En la misma ocasión. En la fiesta del Santísimo Sacramento. A lo mismo. No son todos ruiseñores. Diálogo entre Coridón y otro. La vaga esperanza mía. Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. La vaga espernza mía. Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. A lo mismo. En la misma festividad por la vida y ascensos de don fray Diego de Mardones, obispo de Córdoba. Al nacimiento. A lo mismo. En la fiesta de la Adoración de los Reyes. A la Purificación de Nuestra Señora. Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. A lo mismo. En persona de un ministro importundo de una dama que descubriese un secreto. Al Rey y Reina, nuestros señores, antes de reinar. Ansares de Menga. No vayas, Gil, al sotillo. En una fiesta de San Josef, estando descubierto el Santísimo Sacramento.Al nacimiento de Cristo Nuestro Señor. Alegoría de la brevedad de las cosas humanas. Tejió de piernas de araña. Poneremos la experiencia. Absolvamos el sufrir. Letrilla burlesca. REDONDILLAS:A unas monjas, convalescientes de la enfermedad que refiere. Redondilla varia. Contra una roma. DECIMAS: Al Marqués de Guadalcázar; de las damas de Palacio. Al conde de Salinas. De unas fiestas de Valladolid en que no se hallaron los Reyes. De puños de hierro ayer. Décimas. Musas, si la pluma mía. En persona de un caballero ausente, a una dama que amenazaba con su venida al mismo a quen él la había encomendado. De la profesión de una monja que tenía muchos años. De doña Brianda de la Cerda. De un retrato de la marquesa de Ayamonte. A dos devotos de monjas que acudían en un mismo tiempo a muchos conventos. A un hombre que temía tanto a los truenos, que se sospechó de él lo que se refiere a esta décima. A una monja , enviándole un menudo y un cuaarto de ternera. A una monja Que le había enviado una pieza de holanda. A la misma, enviándole un menñudo. A Marcos de Torres que tenía un lavadero de lana donde solían ir a jugar. A Marcos de Torres, deteniéndole un paje músico que le había enviado con un recado desde un lavadero de lana, adonde estaba. Décimas-¡Oh montañas de Galicia! A dos monjas, enviándoles una cesta de ciruelas cubierta de de unas hojas de laures.Enviando dos conejos a una monja parienta suya. A don Martín de Saavedra, viniendo a Madrid con cuartanas. En persona de don Gómez de Figueroa, en la máscara que hizo en Córdoba cuando vino de la toma de Larache . De la toma de Larache.A don Diego Páez de Castrillejo, animándole a que hiciese versos. A otra monja que le había pedido unas castañas y batatas. A la señora doña Catalina de la Cerda, que habiendo soltado unpajarillo, se le volvió a las manos. A don Pdro de Cárdenas, de un caballo que le mató un toro. Inscripción para el sepulcro de la señora reina doña Margarita. En la misma ocasión. A un letrado, llamado por mal nombre "El licenciado Mojón", habiéndole hurtado una ropa de damasco. Décima que recitó Juan del Castillejo, estudiante del Colegio de los jesuitas, deCórdoba, antes de la representación de un diálogo delante del obispo. De unas empanadas de un jabalí que mató el marqués del Carpio. En la muerte de Bonamí, eneno flamenco. A un bufón muy frío, llamado Dotés, acatarrado de la burla que se refiere a la margen. En agradecimiento de una décima que el conde de Saldaña hizo en defensa del "Polifemo" y "Soledades".De una yegua que le quiso feriar el duque de Béjar. De la " Fábula de Faetón" que escribió el conde de la Oliva en el Parque. En persona de un galán, a una dama que le había ofrecido ir a un jardín. Décima-"Guerra me hacen dos cuidados". En persona de un portugués, a una dama que le había dado un búcaro. A Pedro VErgel, alguacil de Corte, que en unas fiestas dió su caballo a un caballero a quienñ un toro había herido el suyo, y yendo a pie a darles de cuchilladas, nole aguardó. En la muerte de don Rodrigo Calderón. A la señora doña Francisca de TAvora, habiendo dado una banda leonada a don Diego de Vargas. A don Antonio Chacón, que desde Colmenar Viejo le había enviado un requesón. Al mismo, que, por acudir apresuradamente a excusar una pendencia, se desconcertó un pie. Décima-"Siempre le pedía al amor". Décima-"Esta hermosa prisión". De un caballero que había de hacer una jornada a Italia. A don Agustín Fiesco, en quien un administrador de sus prebendas le tenía librados los alimentos que le pagaba por meses. De unperrillo que se le murió a una dama, estando ausente su marido. Décima-""Tropezó un día Dantea". A la señora doña Atonia de Mendoza. Contra los mèdicos. Décima- "Casado el otro se halla". Contra los abogados. Contra los mismos. A un caballero que, estando con una dama, no pudo cumplir sus deseos. Al conde de Villalba, a quien le había remitido el conde de Villaflor para que le diese una empanada de capón que le había prometido. A don Antonio Coloma, canónigo de Toledo y arcediano de Madrid, camarero del Serenísimo Infante don Fernando, tardándose en enviarle un regalo que le había prometido. A una dama que habiendo dejado un galán por otro más rico, volvía a procurar su amistad.
1. 861.3; 2. Literatura española-poesía; 3. Poesía española-1517-1700; 4. Poesía española-colecciones I. Alcalá-Zamora y Torres, Niceto
(1) Inv.: 00011778 S.T.: 861.3 GON p